Se trata de un pequeño fruto de color rojo y de sabor ácido y que crece a orillas de los ríos de los pueblos indígenas de la cuenca amazónica.
Entre sus principales propiedades se puede mencionar que es un excelente antioxidante y antiinflamatorio, astringente, anti-viral; ayuda en el tratamiento de las migrañas y depresiones y constituye un adelgazante natural.
Contiene más de 60 veces ácido ascórbico que el limón, así como proteínas, betacaroteno, minerales como el calcio, hierro y fósforo y vitaminas como la riblofavina, niacina y tiamina.
Por su contenido en vitamina C, favorece la formación del colágeno, indicado para la formación a los huesos, dientes, encías, vasos sanguíneos y piel, estimula las defensas naturales del organismo e interviene en la absorción del hierro procedente de los alimentos de origen vegetal.
Ejerce una acción antioxidante, que lucha contra los radicales libres, hay que resaltar la importancia de la vitamina C en afecciones oculares, como la degeneración macular y cataratas. Es especialmente importante para los niños, embarazadas, lactantes y las personas de la tercera edad.
Además participa en los procesos de desintoxicación del hígado e inhibe la formación de nitrosaminas -sustancias potencialmente cancerígenas- en el estómago; la falta de vitamina C hace que aparezca cansancio y dolor en las articulaciones.
Entre sus principales propiedades se puede mencionar que es un excelente antioxidante y antiinflamatorio, astringente, anti-viral; ayuda en el tratamiento de las migrañas y depresiones y constituye un adelgazante natural.
Contiene más de 60 veces ácido ascórbico que el limón, así como proteínas, betacaroteno, minerales como el calcio, hierro y fósforo y vitaminas como la riblofavina, niacina y tiamina.
Por su contenido en vitamina C, favorece la formación del colágeno, indicado para la formación a los huesos, dientes, encías, vasos sanguíneos y piel, estimula las defensas naturales del organismo e interviene en la absorción del hierro procedente de los alimentos de origen vegetal.
Ejerce una acción antioxidante, que lucha contra los radicales libres, hay que resaltar la importancia de la vitamina C en afecciones oculares, como la degeneración macular y cataratas. Es especialmente importante para los niños, embarazadas, lactantes y las personas de la tercera edad.
Además participa en los procesos de desintoxicación del hígado e inhibe la formación de nitrosaminas -sustancias potencialmente cancerígenas- en el estómago; la falta de vitamina C hace que aparezca cansancio y dolor en las articulaciones.