Anorexia. Personas que Nacen en Primavera Tienen Más Probabilidades de Sufrir de Anorexia. Estudio
Como muchos de nosotros sabemos y hemos hablado en artículos anteriores, la anorexia nerviosa es un trastorno de la conducta alimentaria que se caracteriza por la gran pérdida de peso que se origina la propia persona al verse y sentirse "gorda".
Según un estudio que publica la revista British Journal of Psychiatry, indica que las personas que nacieron en primavera tienden a sufrir de anorexia nerviosa.
Lahiru Handunnetthi y sus colegas del Centro de Genética Humana de la
Universidad de Oxford llegaron a esa conclusión tras comparar los datos
de cerca de 1300 pacientes con los de la población general.
Handunnetthi explicó: “La predisposición a sufrir anorexia está condicionada por la estación del año en que nace una persona, siendo más alta en aquellos nacidos en primavera y más baja para los nacidos en otoño”.
Según los investigadores, estudios previos sugerían que la prevalencia de enfermedades mentales como la esquizofrenia o el trastorno bipolar es mayor entre los nacidos en la "estación de las flores", por lo que no resulta sorprendente que la anorexia se añada a la lista.
El investigador sugiere que habría que identificar qué factores influyen en la predisposición a la enfermedad, posiblemente vinculados a la exposición al sol o a infecciones durante el embarazo, a la alimentación, o a los niveles de vitamina D de la madre mientras se desarrolla el feto.
Handunnetthi explicó: “La predisposición a sufrir anorexia está condicionada por la estación del año en que nace una persona, siendo más alta en aquellos nacidos en primavera y más baja para los nacidos en otoño”.
Según los investigadores, estudios previos sugerían que la prevalencia de enfermedades mentales como la esquizofrenia o el trastorno bipolar es mayor entre los nacidos en la "estación de las flores", por lo que no resulta sorprendente que la anorexia se añada a la lista.
El investigador sugiere que habría que identificar qué factores influyen en la predisposición a la enfermedad, posiblemente vinculados a la exposición al sol o a infecciones durante el embarazo, a la alimentación, o a los niveles de vitamina D de la madre mientras se desarrolla el feto.